La gran fuente

-Si, ya- sonrei, -Lo lamento- susurre, -A veces se me da empanarme- rei y mire a Betty, -Betty!, no quieras que nuestro unico soltero y guapo del iternado salga corriendo- rei

-No importa, Betty - respondo con una sonrisa, todavía algo azorado.

-¿Y las demas chicas?- susurre, mirando a Betty, -¿Se fugaron?-

Mire a Betty fijamente y sonrei a medias, -Cierto Huma, mjor te compras un repelente contra chicas- rei

-De verdad, vais a conseguir que me salgan los colores...- me río, tapándome la cara con las manos.

Rei
-Venga... es broma- susurre, -O tal vez no- lo mire fijamente, -Aqui hay un chico por cada 3 solteras- rei

-Qué bromistas...- me río. -o.o De verdad hay tanta escasez de tíos aquí?- pregunto asombrado.

Rei ante la lengua de Betty
-Si, asi es- murmure, -Solo hay tres chicos aqui, y dos de ellos tienen novia- susurre, -Asi que ya te puedes imaginar-

-A ver si es que me he equivocado de internado y éste sólo es femenino...- murmuro entre risas.
-Corrige: no hay muchos chicos.- puntualizo sonriente.

Rei
-Se supone que es un internado mixto, pero ya ves- me encogi de hombros, riendo y posando mi mano levemente sobre la suya, -Ah.. vaya.. lo he vuelto a hacer- susurre ruborizada, -Lo siento Huma, te dije que soy algo impulsiva- sonrei timidamente

Mire a Betty un tanto seria
-Venga Betty, que haras sentir un pedazo de carne al pobre Huma- susurre

-Ya he dicho que no pasaba nada...- recuerdo. Noto un zumbido en un bolsillo del pantalón, y al hurgar saco un reloj. Miro la hora: -Lamento no poder quedarme más rato, pero necesito irme ya a dormir. Mañana tendré que levantarme temprano para terminar de instalarme ^^ ...- me excuso, y me encamino al internado, despidiéndome de ellas con la mano: -Ha sido un placer conoceros, nos vemos.-

-Hasta luego Huma- susurre ruborizada, -Que descanses- sonrei

-HAsta mañana- susurre, -Genial, ¿que hago yo aqui sola?- murmure, poniendome de pie y dirigiendome a mi habitacion

Llego hasta la gran fuente, y me siento en el borde a contemplar el agua, rememorando el día de ayer. Me paso repetidas veces las manos por los cabellos.